Creía en los pricipes azulados, pero el mío tocaba la guitarra y dormía en plazas, vivía toda la semana entre nubes (como ahora) y soñaba con comer perdices.
Me terminé comiendo toda clase de especies pero ninguina perdiz.
...Un Dia, CuaLquieR Día, CoMo SuaVe BriSa, VoY a MeCeR TuS CaBeLLoS y CaeRé A TuS PiEs CoMo HoJiTa De oToÑo...
++++VueLa LeJoS DonDe NaDie PueDa VeRTe
°°°°°°°QuieRo VeR EsA MiRaDa QuE EsConDe LoS PaiSaJeS MaS PreCioSoS DeL MuNDo°°°°°°°°
No hay comentarios:
Publicar un comentario